El Guajiro Natural, La Historia de Polo Montañez
El Guajiro Natural, La Historia de Polo Montañez
De origen campesino y humilde, con una formación musical autodidacta, se convirtió en uno de los símbolos musicales de Cuba en apenas 2 años. Murió en la cumbre de su carrera y trascendió con su maravillosa obra musical.
Fernando Borrego Linares (Polo Montañez) nació en la Sierra del Rosario, en Pinar del Río, Cuba, el 5 de junio de 1955. Hijo de padre carbonero, de origen muy humilde aunque de mucha riqueza espiritual y un talento innato para captar los sonidos característicos del son cubano, aún sin contar con formación musical alguna. Fue un cantante muy popular con una historia de leyenda y una carrera profesional corta e intensa.
«Polo compone mientras camina o monta un tractor, mientras nada, bajo la lluvia, el sol o la luna, cuando siembra la tierra… y hasta durmiendo»
Comenzó a los 7 años «golpeando los cueros de una tumbadora» en las fiestas familiares, según decía. Su padre tocaba el acordeón y la madre bailaba. Se crió en un ambiente muy musical, a pesar de los apremios económicos familiares. Durante las noches escuchaban la radio, el único entretenimiento posible en ese momento, donde el pequeño Fernando se aprendía de memoria, con gran facilidad, las canciones románticas de los cantautores españoles e italianos (José José, Nicola di Bari, José Feliciano, entre otros) de la denomindada «onda pop» de ese momento. Más tarde se interesó por las cuerdas, ejecutando la guitarra con notable talento y un oído musical impecable. – «Ahora me doy cuenta de que entre las cuerdas y la percusión estaba el camino de la música cubana, el que más tarde me trazaría como un objetivo en la vida». Luego formó parte de un sexteto familiar integrado por su padre, sus hermanos y otros familiares y amigos. En los 90 inició su carrera profesional como vocalista y tresero.
A los 44 años contaba con más de 70 canciones propias, escritas de forma autodidacta, pues no tenía ninguna formación profesional ni conocimientos musicales que no sean los que aprendió de escuchar los sonidos del monte. Su banda simplemente seguía el tono de su voz con los instrumentos y con una maestría impecable se generaban armonías bellísimas con imágenes poéticas de sorprendente lirismo.
Su popularidad comenzó con la salida al mercado internacional de su primer disco «Guajiro Natural», grabado por la casa discográfica LUSAFRICA, la que un año más tarde patrocinó su segundo CD titulado «Guitarra Mía».
En menos de un año —la segunda mitad del 2001— pasó a encabezar las listas de éxitos de las radios del país con el tema «Un montón de estrellas». Con este y otros temas de su primer disco, Guajiro natural, conquistó al público colombiano y se abrió paso en otros países de América Latina y de Europa occidental. Tras su muerte salió al mercado un tercer disco de tributo a su memoria.
Su nutrida obra de compositor sobrepasa el centenar de canciones, la mayoría inéditas, comprendidas en diversos géneros musicales.
Polo Montañéz pasó a la inmortalidad, como consecuencia de un accidente de tránsito el 26 de noviembre de 2002. Un aura de misticismo lo envolvió luego de su muerte, ya que se sostiene que él mismo profetizó su meteórica carrera y su muerte, y no se explican cómo un campesino prácticamente iletrado pudiera concebir melodías tan actualizadas, viviendo en parajes tan apartados dentro del monte, alejado del «mundanal ruido».
Polo Montañéz es reconocido nacional e internacionalmente como uno de los cantautores más populares de Cuba, considerado una leyenda sin precedentes por prestigiosas personalidades de la música en el mundo, como ser Gilberto Santa Rosa, Willie Colon entre otros.
Fuentes:
http://laventana.casa.cult.cu
http://www.polomontanez.net